Llevo un tiempo usando dispositivos Google Home y últimamente no oyen las órdenes con claridad, a menos que estés prácticamente gritando. La verdad es que es un poco frustrante cuando estás acostumbrado a pedirlas con calma. Normalmente, la causa es el polvo o los residuos que se acumulan en esas pequeñas muescas del micrófono, sobre todo si hay un humidificador o agua dura. El polvo y los depósitos minerales pueden silenciar los micrófonos, convirtiendo el reconocimiento de voz en una pesadilla. Por eso, la solución suele ser limpiar bien esas zonas; simple en teoría, pero no siempre tan sencillo en la práctica.

Cómo solucionar problemas del micrófono de Google Home limpiándolo

Limpieza de los micrófonos del Google Home original

  • Todo se reduce a las pequeñas muescas en la parte superior del dispositivo. En el Google Home original, hay dos muescas visibles. Detectarlas puede ser complicado, ya que se mimetizan con el diseño.
  • Use aire comprimido, concentrado en las muescas. Sostenga el aire comprimido en posición vertical y aplique ráfagas cortas. Esto ayuda a eliminar el polvo que pueda estar atrapado dentro o alrededor de los micrófonos.
  • Si eso no lo soluciona, puedes intentar sacar el polvo con un palillo o un cepillo de cerdas suaves. Ten cuidado: esas muescas son diminutas y no querrás dañar los micrófonos ni que la suciedad se acumule más en el interior.

Limpieza de los micrófonos del Google Home Mini

  • En el Mini, las muescas para micrófonos se encuentran a ambos lados de los cuatro LED superiores. Así, verás dos pequeños micrófonos junto a las luces de estado.
  • Lo mismo ocurre aquí: golpee esos puntos con aire comprimido, apuntando con cuidado para expulsar el polvo o los residuos de las pequeñas aberturas.

Curiosamente, la limpieza suele marcar una diferencia notable, y los dispositivos empiezan a escuchar las órdenes mucho mejor. Es sorprendente lo que puede hacer un pequeño golpe de aire comprimido, pero si no funciona, un reinicio suave puede ayudar: desenchufar, esperar unos 10 segundos y volver a enchufar. A veces, un reinicio rápido soluciona los fallos temporales.

Si después de todo esto, el reconocimiento de voz sigue fallando, es hora de intentar un restablecimiento completo de fábrica. Puedes hacerlo a través de la app Google Home o manteniendo pulsado el botón de silenciar el micrófono durante unos 15 segundos, hasta que el dispositivo anuncie que se está restableciendo. Claro que Google lo haría un poco más complicado que simplemente pulsar un botón.

¿Y si esto aún no ayuda?

Consulta su página de soporte para obtener más opciones, como diagnósticos de hardware, o considera contactar con el soporte de Google, ya que podría tratarse de un problema de hardware. A veces, el polvo ya no es el problema, sino un micrófono defectuoso u otro fallo de hardware.

Resumen

  • Utilice aire comprimido para soplar el polvo de las pequeñas muescas del micrófono.
  • Si es necesario, retire con cuidado los restos con un palillo.
  • Desenchufe, espere 10 segundos y vuelva a enchufarlo para realizar un reinicio suave.
  • Realice un restablecimiento de fábrica si limpiar y reiniciar no ayudan.

Resumen

El polvo y la acumulación son difíciles de detectar, pero suelen tener solución. Limpiar esas pequeñas muescas del micrófono suele ser suficiente para restaurar el reconocimiento de voz, al menos temporalmente. Sin embargo, si los problemas persisten, podría tratarse de un fallo de hardware o de un problema de software más grave. Con suerte, esto le ahorrará algunas horas a alguien, porque, sí, lidiar con problemas técnicos como este es tan molesto como sorprendentemente sencillo una vez que sabes qué hacer.