Cómo solucionar problemas comunes de actualización de Windows 11

📅
🕑 3 minutos de lectura

Gestionar las actualizaciones de Windows 11 a veces puede ser un poco impredecible. Claro, el sistema operativo suele corregir vulnerabilidades y añadir funciones, pero de vez en cuando, una actualización se vuelve un desastre. Puede que tus herramientas de personalización de terceros favoritas dejen de funcionar, o que las actualizaciones simplemente se nieguen a instalarse. Es frustrante, sobre todo si confías en un sistema fluido y sin errores. Si has tenido problemas con actualizaciones recientes, este resumen podría ayudarte a solucionarlo. Ya sea desinstalando una base de conocimientos problemática o forzando una actualización manualmente, estos consejos pueden ahorrarte dolores de cabeza y hacer que tu Windows vuelva a funcionar.

Cómo solucionar problemas recientes de actualización de Windows 11

Cómo instalar manualmente una actualización difícil de solucionar

A veces, Windows simplemente no quiere obtener las últimas actualizaciones automáticamente. Quizás se deba a una descarga corrupta o a un fallo que detiene la instalación. En estos casos, conocer el número exacto de actualización (KB) permite descargarla e instalarla manualmente. De esta forma, se evitan los problemas de Windows Update y se obtienen directamente los parches de seguridad o correcciones de errores más recientes.

  • Abra Configuración ( Win + I) y vaya a Windows Update.
  • Haga clic en Historial de actualizaciones en Más opciones : esto muestra todas sus actualizaciones recientes.
  • Busque la actualización específica con la que tiene problemas en la sección Actualizaciones de calidad y anote su número de KB (como KB5022913).

A continuación, visita el Catálogo de actualizaciones de Microsoft. Escribe el número de KB en la barra de búsqueda y pulsa Intro. Selecciona la arquitectura correcta (x64 para la mayoría de las PC modernas), haz clic en Descargar y, a continuación, haz doble clic en el archivo.msu descargado para instalarlo. Es un poco raro que Windows lo haga tan manual, pero funciona si la actualización automática falla. Normalmente, esto ayuda a eliminar actualizaciones bloqueadas o descargas dañadas.

Opción 1: Pausar las actualizaciones si las cosas se vuelven inestables

Si las actualizaciones recientes están causando problemas como bloqueos del sistema o problemas de compatibilidad, pausarlas temporalmente podría ser la solución. Windows permite pausarlas un tiempo, como si se le diera tiempo al sistema para que se estabilice antes de volver a intentarlo.

  • Vaya a Configuración > Actualización de Windows.
  • Haga clic en Más opciones y busque el menú desplegable junto a Pausar actualizaciones.
  • Seleccione un período de tiempo (por ejemplo, 7 o 14 días): esto es como poner en pausa el caos.

Si estás listo para probar las actualizaciones de nuevo, simplemente regresa a Windows Update y haz clic en «Reanudar actualizaciones». Fácil, ¿verdad? Así, Windows podrá intentar actualizarse de nuevo después de que hayas solucionado cualquier problema.

Opción 2: Desinstalar actualizaciones con errores

A veces, la última actualización no funciona bien. Quizás tu dispositivo se ralentice, se bloquee o algunos controladores fallen después de instalarla. En esos casos, desinstalar la actualización problemática es una buena idea. Sí, es un poco como volver a una versión más estable de Windows, pero suele ser necesario.

  • Presione Windows + I para abrir Configuración.
  • Vaya a Windows Update y haga clic en Historial de actualizaciones.
  • Desplácese hasta encontrar Configuraciones relacionadas y haga clic en Desinstalar actualizaciones.

Aparecerá una ventana con las actualizaciones recientes. Busca la que causa el problema, pulsa «Desinstalar» y confirma. El sistema completará el proceso, que puede tardar unos minutos. Notarás que Windows se reinicia un par de veces; es normal. Espera a que termine.

Otros consejos para tener estas actualizaciones bajo control

Seamos sinceros, Windows Update puede ser un poco quisquilloso. A veces, basta con ejecutar una herramienta rápida de solución de problemas para solucionar problemas subyacentes o archivos dañados. También puedes comprobar si el espacio en disco o la conexión de red podrían estar causando el problema. Por último, pero no menos importante, echar un vistazo al Solucionador de problemas de Windows Update (en Configuración > Solucionar problemas > Solucionadores de problemas adicionales > Windows Update) a veces puede solucionar problemas sin mayor problema.