Cada uno personaliza su ordenador con Windows 11 a su gusto. Por ejemplo, algunos prefieren tener la barra de tareas en la parte inferior porque facilita el acceso rápido a sus aplicaciones favoritas, el reloj y las notificaciones. Pero, sinceramente, a veces ese espacio se desperdicia, sobre todo en pantallas pequeñas o si simplemente se busca una apariencia más limpia. La buena noticia es que puedes hacer que la barra de tareas desaparezca cuando no la necesites, liberando así más espacio en la pantalla. Y si cambias de opinión más tarde, es igual de fácil recuperarla. Así que, aquí te explicamos cómo activar o desactivar la visibilidad de la barra de tareas en Windows 11, sin necesidad de usar configuraciones complejas.

Es un poco raro, pero a veces la barra de tareas se niega a ocultarse incluso después de activar la función de ocultación automática. Normalmente, se debe a que algunas notificaciones o aplicaciones le dan una razón para permanecer visible. Por suerte, existen algunos trucos para solucionarlo, ya sea que solo quieras ocultarla temporalmente o que desaparezca para siempre hasta que decidas lo contrario.

Cómo ocultar la barra de tareas en Windows 11

Habilitar Ocultar automáticamente desde la configuración

  • Haga clic derecho en la barra de tareas y seleccione Configuración de la barra de tareas.
  • En la ventana de configuración, desplácese hacia abajo y haga clic en Comportamientos de la barra de tareas.
  • Marque la casilla junto a Ocultar automáticamente la barra de tareas.

Esto permite que Windows oculte la barra de tareas al instante cuando no la estés usando. El problema es que esta configuración puede anularse si una notificación o aplicación te avisa, o si hay una ventana abierta sobre la barra de tareas. La idea es que Windows intenta ser útil, aunque a veces resulte un poco molesto. La barra de tareas desaparecerá en cuanto alejes el ratón de la parte inferior de la pantalla. En algunas configuraciones, puede tardar uno o dos segundos en ocultarse, así que no te preocupes si no es instantáneo siempre.

Ajustar la posición y el comportamiento de la barra de tareas

  • Si quieres ir un paso más allá, puedes cambiar la ubicación de tu barra de tareas (a la izquierda, a la derecha o en la parte superior) en caso de que prefieras que no estorbe.
  • En Comportamientos de la barra de tareas, busca el menú desplegable junto a Alineación de la barra de tareas. Prueba a alternar entre opciones como Izquierda, Centrada o Derecha. A veces, reposicionar la barra de tareas puede mejorar la fiabilidad del ocultamiento automático.
  • Ten en cuenta que esto podría no solucionarlo todo si las notificaciones o las aplicaciones abiertas mantienen la barra de tareas visible. Aun así, vale la pena intentarlo.

Qué hacer cuando la barra de tareas no se oculta

Si la barra de tareas permanece obstinadamente en su lugar a pesar de seguir los pasos, es posible que haya algunas cosas que estén causando el problema.

  • Primero, revisa las notificaciones. Abre el Centro de Notificaciones (haz clic en el icono en el extremo derecho de la barra de tareas) y descarta las alertas pendientes. A veces, las notificaciones activas o no pospuestas se ocultan automáticamente.
  • A continuación, comprueba si alguna aplicación abierta está forzando la barra de tareas a permanecer en su lugar. Intenta cerrar las aplicaciones innecesarias una a una; a veces, una aplicación con una superposición persistente o en modo de pantalla completa puede causar problemas.
  • Otro truco: reinicia el Explorador de Windows. Para ello:
Press Ctrl + Shift + Esc to open Task Manager. Under the Processes tab, find Windows Explorer. Right-click it and select Restart.

Esto puede solucionar los fallos que impiden que la barra de tareas se oculte. A veces, basta con reiniciar rápidamente el Explorador para que la función de ocultación automática vuelva a funcionar.

Solucionar problemas persistentes

  • Si nada de esto funciona, considera reiniciar tu PC por completo. Es algo clásico, pero reiniciar puede solucionar problemas persistentes de Windows.
  • Y en algunas configuraciones, cambiar la resolución de la pantalla o desconectar los monitores secundarios temporalmente puede ayudar a restablecer el comportamiento de ocultamiento automático.
  • Para una solución más permanente, busca actualizaciones de Windows o busca errores conocidos en tu versión actual. A veces, una actualización rápida del sistema puede solucionar estos problemas.

Consejos adicionales

  • ¿Buscas una forma de ocultar completamente la barra de tareas sin usar la función de ocultación automática? Podrías ocultar los iconos de la bandeja del sistema o incluso modificar la configuración del registro, pero es una opción más avanzada y no siempre merece la pena.
  • Si la ocultación automática no funciona, algunos usuarios confían en herramientas de terceros como Winhance o scripts personalizados que fuerzan el ocultamiento de la barra de tareas, pero tenga cuidado: estas son soluciones no oficiales y pueden causar otros problemas.

Resumen

En resumen, modificar la configuración integrada suele ser suficiente. El proceso no es perfecto, y a veces Windows puede ser un poco terco, sobre todo si las notificaciones siguen apareciendo o las aplicaciones se ejecutan en segundo plano. No olvides mantener el sistema actualizado; estos parches a veces mejoran la fiabilidad. Y si todo lo demás falla, reiniciar el Explorador de Windows o el propio PC suele solucionar el problema.

Resumen

  • Utilice la configuración de la barra de tareas para habilitar la ocultación automática.
  • Ajuste la posición y el comportamiento de la barra de tareas para obtener mejores resultados.
  • Cierre las notificaciones o aplicaciones que puedan bloquear el ocultamiento automático.
  • Reinicie el Explorador de Windows a través del Administrador de tareas si es necesario.
  • Reinicie la PC si las cosas siguen actuando de manera extraña.

Resumen

Ocultar la barra de tareas no siempre es sencillo, pero modificar la configuración y cerrar aplicaciones problemáticas suele ser la solución. A veces, Windows solo necesita un pequeño empujón o reiniciarse para volver a la normalidad. Ojalá esto ayude a optimizar el espacio de trabajo sin complicaciones. Es algo que funcionó en un par de configuraciones diferentes, ¡así que inténtalo!