Mantener el Administrador de Tareas siempre visible en Windows 11 es bastante útil cuando manejas varias aplicaciones y necesitas una vista constante de los procesos, el uso de recursos o simplemente quieres que esté siempre visible. Créeme, puede ser molesto que desaparezca tras todas esas nuevas ventanas que abres. Por suerte, hay algunas maneras de asegurar que permanezca visible, ya sea mediante la configuración integrada o herramientas prácticas de terceros. De esta manera, pase lo que pase, el Administrador de Tareas permanece fijo en primer plano, lo que te ahorra esfuerzo visual y un poco de caos. El truco está en configurarlo correctamente para que no desaparezca al abrir aplicaciones o cambiar de ventana. Aquí tienes la explicación práctica de cómo hacerlo, con algunas opciones según lo que te resulte más práctico.

Cómo mantener el Administrador de tareas siempre visible en Windows 11

Uso de la configuración dentro del Administrador de tareas

Esta es probablemente la forma más sencilla si quieres que esté integrado y no quieres que las aplicaciones adicionales saturen tu sistema. Al abrir el Administrador de tareas, las versiones más recientes tienen un pequeño icono de engranaje en la parte inferior izquierda. Al hacer clic en él, accederás a Configuración. Lo curioso es que quizás notes que el botón «Siempre visible» no es tan visible a primera vista; a veces está oculto en un submenú, así que tenlo en cuenta.

Una vez que marques esa casilla, el Administrador de tareas debería permanecer visible incluso al abrir o cambiar de ventana. En algunas configuraciones, podrías tener que reiniciarlo para ver el efecto, pero en general funciona bastante rápido. Ten en cuenta que esta función aún no está disponible en todas las versiones de Windows, así que si no la ves o no permanece visible después de cerrar y volver a abrir, probablemente sea por eso.

Es un poco raro, pero en una máquina funcionó a la perfección desde el principio, y en otra hubo que reiniciarla. No sé por qué funciona de forma diferente, pero así es Windows.

Usando el clic derecho en la flecha de la barra de tareas y el icono del Administrador de tareas

Si prefieres un método rápido y sencillo, prueba a hacer clic derecho en la pequeña flecha que apunta hacia arriba en la barra de tareas (la bandeja del sistema).Desde allí, haz clic derecho en el icono cuadrado gris del Administrador de tareas. A veces, hay una opción llamada «Siempre visible» directamente en el menú. Si la ves, simplemente márcala y listo.

Este método se parece más a un interruptor: lo activas, se queda visible, lo desactivas y vuelve a la normalidad. Funciona sorprendentemente bien, pero no todas las compilaciones de Windows tienen esta opción. Aun así, vale la pena probarlo porque a veces funciona mejor que la configuración integrada del Administrador de tareas.

Cómo usar Microsoft PowerToys para mantener el Administrador de tareas en primer plano

Esta es la solución si realmente quieres mantener ciertas aplicaciones siempre visibles. PowerToys es un conjunto de utilidades de Microsoft, y su función «Siempre visible» es muy práctica. Visita la página de Microsoft PowerToys y descárgala. Una vez instalada, abre PowerToys y ve a la sección «Siempre visible» en la barra lateral.

Puedes activar esta función e incluso personalizar la combinación de teclas. La predeterminada suele ser Windows + Ctrl + T, pero puedes cambiarla si entra en conflicto con tus otros atajos: simplemente haz clic en el icono del lápiz y configura tu propia combinación. Luego, abre el Administrador de tareas, pulsa la combinación de teclas y, ¡listo!, aparecerá un borde azul que indica que está anclada en la parte superior.

Consejo: Si vuelves a pulsar esa tecla de acceso rápido, puedes anclar aplicaciones adicionales sin tener que acceder a los menús. Parece un poco peculiar, pero funciona con una fiabilidad sorprendente. Además, tienes opciones para bordes, colores, sonidos y para excluir ciertas aplicaciones de la regla de siempre visible.

Ten en cuenta que la aplicación ofrece muchísimas opciones de personalización, pero, sinceramente, en algunas configuraciones, la superposición de ventanas es un poco inestable. En general, es una buena solución si las opciones integradas no son suficientes.

Cómo desactivar la opción Siempre visible para el Administrador de tareas

Buenas noticias: desactivarla es tan sencillo como activarla. Si usaste la configuración del Administrador de tareas para activarla, simplemente regresa y desmarca la opción «Siempre visible».

Si usaste PowerToys, simplemente presiona la tecla de acceso rápido de nuevo o ve al menú de PowerToys y desactívala. De igual manera, si hiciste clic derecho en el ícono de la barra de tareas y activaste la opción, simplemente desactívala. Fácil, rápido y sin complicaciones.

Lectura adicional

Mientras estés aquí, te conviene saber que otros navegadores como Firefox también tienen su propia versión de Administradores de Tareas integrados, que puedes explorar a través de su configuración. Un adelanto por si quieres echar un vistazo y ver cuánto consumen recursos tus pestañas o extensiones.

Resumen

Sinceramente, mantener el Administrador de Tareas visible no es tan complicado, pero es uno de esos pequeños trucos que te ahorran tiempo y molestias. Tanto si usas la opción integrada como PowerToys, es bastante fácil de configurar. Sin embargo, ten en cuenta que a veces Windows se excede y algunas funciones podrían requerir un reinicio o restablecimiento. En general, es un truco práctico que te permite mantener las cosas visibles cuando más las necesitas.

Resumen

  • Verifique la configuración del Administrador de tareas para “Siempre visible” si está disponible.
  • Intente hacer clic derecho en el ícono de la barra de tareas para alternar rápidamente.
  • Utilice PowerToys para obtener más control y teclas de acceso rápido: funciona de manera bastante confiable.
  • Apáguelo cuando ya no sea necesario para evitar el desorden.

Conclusión

Conseguir que el Administrador de Tareas se mantenga actualizado no es complicado una vez que sabes dónde buscar. Las opciones integradas cubren la mayoría de las necesidades, y PowerToys añade flexibilidad adicional si deseas más control. Recuerda que Windows puede ser impredecible, así que no te sorprendas si un par de reinicios ayudan a estabilizar la situación. Con suerte, esto te ayudará a optimizar tu flujo de trabajo y te ahorrará problemas en el futuro.