Cómo identificar por qué se sobrecalienta tu portátil
¿Tienes un portátil que se calienta muchísimo o emite ese molesto zumbido? Ya lo has vivido. Muchas veces, el problema es que tu equipo está trabajando arduamente debido a un fallo del software o del entorno, pero a veces es el hardware el que está en las últimas. Averiguar por qué se sobrecalienta tu portátil no siempre es sencillo, pero existen algunas causas comunes y soluciones rápidas que pueden ayudarte a mantenerlo más fresco y silencioso. Una vez identificado el problema, puedes evitar el temido apagado térmico o las ralentizaciones, y seguir usando tu portátil sin sentirte como si estuvieras sentado junto a un pequeño motor a reacción.
Cómo solucionar el sobrecalentamiento de una computadora portátil
Razón 1: Demasiadas tareas ejecutándose a la vez
Esto es bastante obvio, pero vale la pena mencionarlo. Si tienes decenas de pestañas abiertas, aplicaciones en segundo plano funcionando a toda velocidad e incluso un juego o una aplicación de edición de vídeo en ejecución, es probable que la CPU y la RAM de tu portátil estén sobrecargadas de tareas. Esto sobrecarga el hardware, lo que genera mucho calor. A menudo, puedes ver esto en el Administrador de tareas ( Ctrl + Shift + Escen Windows) y ordenar por CPU o memoria para ver quién está consumiendo todos los recursos. Si tu portátil se sobrecalienta, intenta cerrar las aplicaciones y pestañas innecesarias. A veces, un reinicio rápido ayuda a eliminar los procesos en segundo plano que se ejecutan sin que te des cuenta.
Y sí, ten cuidado con Chrome o navegadores similares: consumen muchos recursos si tienes muchas extensiones o pestañas abiertas. En algunas configuraciones, la primera vez que revisas el Administrador de tareas, parece un desastre, pero después de cerrar algunas aplicaciones, mejora mucho. No olvides controlar la temperatura y familiarizarte con la gestión de procesos.
Razón 2: Ejecutar programas que consumen muchos recursos
Esto es especialmente preocupante si inicias alguna aplicación como edición de video, modelado 3D o incluso un análisis antivirus exhaustivo. Estas aplicaciones consumen mucha más potencia de procesamiento de lo normal y generan una gran cantidad de calor. A veces, ni siquiera es evidente: tu PC puede funcionar lento o congelarse un poco, y luego notas que está caliente al tacto. Usa el Administrador de Tareas de nuevo para identificar los verdaderos culpables. Si notas que alguna aplicación aumenta el uso de la CPU, ciérrala si puedes o intenta ejecutar las tareas que consumen muchos recursos por partes en lugar de todas a la vez.
Para mayor seguridad, siempre verifique si su laptop cumple con los requisitos del sistema para nuevas aplicaciones antes de instalarlas. Para mantener la temperatura, limite la cantidad de programas pesados que se ejecutan simultáneamente. Además, considere ajustar la configuración del juego o la resolución del proyecto para reducir la carga.
Razón 3: Obstrucción por suciedad y polvo
No todos los problemas están relacionados con el software; a veces, simplemente se trata de hardware con polvo. El polvo y el pelo pueden obstruir las rejillas de ventilación y las entradas de los ventiladores, formando una especie de manta que atrapa el calor en su interior. Sinceramente, revisar las rejillas de ventilación no es tan complicado. Pueden estar en los laterales, la parte inferior o la parte trasera de tu portátil; busca pelusas o residuos. Si las rejillas están obstruidas, el sistema de refrigeración no puede funcionar correctamente.
Usar aire comprimido en lata para soplar el polvo suele ser suficiente, pero tenga cuidado de no agitarlo más. Sostenga la lata en posición vertical y dale unas ráfagas cortas. Para los más valientes, abrir la laptop para limpiar los ventiladores y disipadores puede marcar la diferencia. Solo recuerde, limpiar su laptop regularmente, al menos cada pocos meses, puede prevenir problemas de sobrecalentamiento en el futuro.
Razón 4: Los ventiladores están bloqueados o se utiliza la computadora portátil en un área cálida
Es un poco raro, pero muchos no se dan cuenta de que colocar una laptop sobre una superficie blanda como una cama o un sofá altera la circulación del aire. Las superficies blandas bloquean las rejillas de ventilación y retienen el calor. De igual manera, trabajar en una habitación calurosa, especialmente cerca de ventanas o bajo la luz solar directa, solo empeora las cosas. El radiador o las rejillas de ventilación necesitan aire limpio para funcionar.
Consejo: Usa tu laptop sobre una superficie dura, como un escritorio o una mesa. Si notas que hace calor en la habitación, considera un espacio con aire acondicionado o al menos un lugar más fresco. Además, evita bloquear las rejillas de ventilación con fundas o telas. A veces, un simple cambio a un lugar más fresco puede bajar la temperatura al instante y silenciar un poco los ventiladores.
Razón 5: Fallas de hardware o componentes defectuosos
A veces, el problema es el hardware. Ventiladores rotos o defectuosos, pasta térmica degradada, CPU o GPU sobrecalentadas o fuentes de alimentación defectuosas pueden causar problemas de temperatura que no se solucionan con ajustes de software. Si has probado todo lo anterior y sigues teniendo temperaturas desorbitadas, quizá sea hora de considerar un diagnóstico de hardware. A menudo, el problema reside en un ventilador defectuoso o en la pasta térmica seca que necesita ser reemplazada. Esto es bastante común, sobre todo en portátiles antiguos.
Prueba a ejecutar diagnósticos de hardware si el fabricante los ofrece; Dell, HP, Lenovo y otras marcas suelen tener herramientas integradas. Si no, lo mejor es llevarlo a un técnico. Pueden reemplazar ventiladores o volver a aplicar pasta térmica, cosas que probablemente no deberías hacer tú mismo a menos que te sientas cómodo con dispositivos electrónicos pequeños.
Con suerte, algunos de estos consejos te ayudarán a mantener tu portátil más fresco y silencioso. Normalmente, se trata de una combinación de administración de software, limpieza y uso responsable. Nada demasiado sofisticado, pero funciona la mayoría de las veces.
Resumen
- Cierre aplicaciones y pestañas innecesarias: libere recursos del sistema.
- Verifique el Administrador de tareas para detectar actividades que consuman recursos y ciérrelas.
- Limpie el polvo de las rejillas de ventilación utilizando aire comprimido.
- Utilice la computadora portátil sobre superficies planas y duras en un ambiente fresco.
- Considere reparaciones de hardware si las soluciones más simples no funcionan.
Resumen
En resumen, el sobrecalentamiento puede ser molesto, pero no siempre es señal de un fallo de hardware. Cuidar tu dispositivo limpiando las rejillas de ventilación, gestionando los procesos en segundo plano y prestando atención a dónde y cómo lo usas puede ser muy útil. Si nada parece solucionar el problema, quizás valga la pena revisar el hardware. Recuerda que las laptops no están diseñadas para entornos calurosos ni cojines blandos; eso es una receta para los problemas. Ojalá esto ayude a evitar que tu laptop se convierta en un calefactor portátil.